viernes 01 de noviembre de 2024 - Edición Nº2158

Nacionales

POLÉMICA

Milei quiere eliminar la Ley de padrinazgo presidencial al séptimo hijo

El Gobierno busca derogar la normativa vigente desde 1974, que implica beneficios para los séptimos hijos. Estos reciben beneficios como gratuidad en estudios, entre otros.



El proyecto de Ley Hojarasca del ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, ingresó hoy en el Congreso y una de las leyes a derogar por la iniciativa es una vieja tradición argentina: el padrinazgo presidencial, una norma que "no tiene lugar en la democracia moderna", según el funcionario.

La Ley N° 20.843 fue sancionada en 1974 con el objetivo de darle forma jurídica al padrinazgo presidencial, una costumbre adoptada en 1907 durante la presidencia de José Figueroa Alcorta, quien le otorgó el beneficio al séptimo hijo de una familia de inmigrantes rusos que residía en el país.

El origen de la tradición se fundamentaba en las raíces migratorias provenientes de Rusia que poseían la creencia de que el séptimo hijo varón es hombre lobo y la séptima hija mujer es bruja. Por ese motivo, los zares del país europeo otorgaban el padrinazgo imperial para proteger a los niños de esos males y evitar que estos fueran abandonados o asesinados a pedradas. Su equivalente sudamericano se manifiesta en el mito del Lobizón, leyenda popular en países como Argentina, Paraguay, Uruguay y el sur de Brasil.

En ese marco, un matrimonio de alemanes del Volga (comunidad asentada en las cercanías del río del mismo nombre) emigró a Argentina y allí dio a luz a José Brost, su séptimo hijo varón, en Coronel Pringles,Provincia de Buenos Aires. Continuando la tradición, le solicitaron al entonces presidente Figueroa Alcorta que apadrinara a su hijo, beneficio que fue acompañado por una beca asistencial para contribuir con su educación y alimentación.

 Durante la presidencia de María Estela Martínez de Perón, la tradición se legisló formalmente con la sanción de la Ley 20.843, la ratificación de un decreto que determinó el beneficio del padrinazgo presidencial para todos los séptimos hijos, originalmente varones pero luego extendido a las mujeres. La normativa garantiza la realización gratuita de estudios a toda persona que haya sido apadrinada por el titular del Poder Ejecutivo. También estipula que se le otorgará al infante una medalla de oro recordatoria.

El último caso conocido fue el de Noah Maciel Portillo, el séptimo hijo varón de una familia de Río Gallegos, Santa Cruz, que nació el 13 de septiembre. Noah es hermano de Adam, Iván, de 16; Tiago, de 1; Aaron, de 10; Ezel, de 8; y David, de 2.

Para Sturzenegger, esa legislación defiende una "figura medieval" que "no tiene lugar en la democracia moderna". Además, la Ley Hojarasca argumenta que "la educación pública gratuita ya es un beneficio general en nuestro país, junto con otras prestaciones sociales como la Asignación Universal por Hijo (AUH)", por lo que "no tiene aplicación práctica en la actualidad".

Sin embargo, el proyecto del Gobierno aclara en su artículo 2° que de sancionarse la ley, "se respetarán los beneficios de quienes hoy cuentan con ellos" al día de entrada en vigencia de la misma. De esa forma, Argentina podría tener su última generación de ahijados presidenciales. 

 

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